El conocimiento global de los campos de las ciencias sociales (psicología, educación, sociología, antropología) y de la salud (medicina, farmacia, enfermería, veterinaria), y sus últimos avances a nivel profesional y de investigación, son difundidos en publicaciones científicas especializadas, principalmente en formato digital. Su oferta ha aumentado vertiginosamente, no solo por la presente demanda a nivel del profesional, sino debido a la necesidad de búsqueda por parte de un paciente crónico y/o dinámico con su salud. Además -y aún más importante-, nuestra sociedad digital y de la información ha generado, gracias a internet, la capacidad de comunicación electrónica, cuya velocidad y acceso es ilimitado. Sobre esta base, se ha creado un gran número de revistas especializadas, además de infinitas webs y blogs, en el campo sociosanitario. El hándicap ahora resulta: ¿cómo se puede seleccionar las de mayor rigor, profesionalidad y calidad bibliográfica sin perder el tiempo en fatigosas búsquedas en la red?

Debe aclararse que la investigación no es un lujo, ni está reservada a una elite; sino una necesidad. Esta siempre debe abordarse desde el rigor y la correcta formación. Según la OMS, “se debe investigar para contribuir a que la población alcance un estilo de vida saludable y una atención adecuada”,¹ por lo tanto, resulta necesario desde el campo sociosanitario, tal como reclama la comunidad científica, el continuo desarrollo de nuevas publicaciones de investigación, con su propios conocimientos, experiencias científicas y evidencias generadas.

Para iniciar el manejo de la calidad de estas publicaciones científicas, primero se atenderán los buscadores bibliográficos en internet (gratuitos). En el caso de las búsquedas internacionales en inglés, se empezará por la prestigiosa MEDLINE y su conocido PubMed (U. S. National Library of Medicine and National Institutes of Health) (se recomienda el manejo del término MESH(. Se continuará con ScienceDirect (Editorial Elsevier^©), donde aparecen numerosos artículos gratis, por el sistema de Open Access. Mencionar aquí también el gran impulso que ha generado el buscador de Google Académico y su propia clasificación de publicaciones a través de su Índice H. Por último, y a nivel internacional, cabe mencionar Cochrane Library Plus, base de datos de revisiones sistémicas de ensayos clínicos, con versión también en castellano.

Aclarar la existencia de la gran y valiosa base de datos: Excerpta Medica Data Base EMBASE (Editorial Elsevier^©), pero sin acceso gratuito.

Para el idioma castellano los buscadores que se recomiendan, ordenados por su trayectoria y servicio, son Dialnet (Materias: Ciencias Sociales, Ciencias de la Salud, Psicología y Educación, Ciencias Básicas), seguido de Latindex y SciELO (ambos, sobre todo, para el ámbito iberoamericano(. Sin olvidar la base de datos del Índice Médico Español-IME (Instituto de Historia de la Ciencia y Documentación López Piñero), la cual ha sido englobada en InDICES-CSIC, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Tras esa búsqueda inicial y obtener posiblemente varias revistas ofertadas, se debe plantear de nuevo nuestra pregunta inicial sobre este uso y manejo: ¿cuáles son las mejores y de mayor prestigio, y, por lo tanto, la que debo seleccionar para mi consulta y formación?; incluso, si quiero difundir mi investigación: ¿cuál debo seleccionar para publicar mi artículo?

Para resolver dichas cuestiones existen dos clasificaciones bibliográficas, las cuales ordenan por Índice de Impacto (número de citas recibidas divididas entre el número de artículos publicados, durante el período de dos años previos( las revistas de contrastada calidad. En primer lugar, en WOS se halla la más prestigiosa: Journal Citation Reports (JCR) (perteneció a la Editorial Thomson & Reuters^© y fue adquirida por el Grupo Clarivate Analytics^©(, además de Emerging Source Citation Index (ESCI): revistas con claras posibilidades de entrar en la misma clasificación que JCR. La segunda clasificación incluye a SciMAGO Journal Country Rank (SJCR) (perteneciente a SCOPUS y a la Editorial Elsevier^©(. En resumen, si una revista científica en cuestión se encuentra dentro de estas dos principales clasificaciones de calidad, se puede decir que está indexada, por lo que su información tiene garantía.

El acceso a ellas debe hacerse a través del portal de la Fundación Española de Ciencia y Tecnología (FECYT), perteneciente al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades del Gobierno de España. También aclarar la existencia del Listado de revistas españolas que poseen el Sello de Calidad FECYT, cuya importancia y prestigio cada vez es mayor. Para finalizar, deben mencionarse las bases bibliográficas para el área de la educación y la formación, como el Departamento de Educación de Estados Unidos y, por lo tanto, de lengua inglesa ERIC; y, para el ámbito de la lengua española, la base bibliográfica REDINED (Tabla).

Tabla Resumen para la formación del manejo de buscadores, e índices de impacto para el manejo de las publicaciones científicas en el ámbito socio/sanitario

Al tomar como centro el recurso de conocimiento, información y formación de páginas webs especializadas en el ámbito sociosanitario,² debe destacarse que para su correcto uso y manejo deben seguirse las recomendaciones detalladas a continuación. Se comenzará con la referencia del trabajo de Mayera y Leis,³ el cual recoge una primera y valiosa selección de aspectos de deferencia y calidad de estas webs especializadas en salud, como los siguientes:

• Identificación: se recogen de forma satisfactoria los datos básicos; título, URL, autores, editores, destinatarios.

• Autor: analiza las características relacionadas con la autoría de la página.

• Enlaces externos: aspectos relacionados con el acceso a otras páginas desde el portal analizado.

• Acceso desde el exterior y aspectos técnicos.

• Aspectos estéticos.

• Aspectos del contenido.

En cuanto a este control de la calidad de la información en internet, también deben destacarse principalmente dos iniciativas, que llevan en funcionamiento más de 10 años⁴: la más extendida a nivel internacional es la Health On the Net Foundation (HON), establecida en Suiza en 1996; y, en particular para España, la más conocida desde hace años según las encuestas resulta el programa de calidad de Web Medica Acreditada (WMA) del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, que se inició en 1999 y del que son responsables directos los autores de esta carta. Dichas iniciativas ofrecen diversas herramientas, desde una perspectiva integral de servicio a la sociedad, con unos objetivos comunes: la mejora de la calidad de la información médica y el acceso de los usuarios a la red de forma más segura.

Para finalizar se recogen las valiosas y muy útiles recomendaciones de un grupo de investigadores expertos⁵ en dicha materia de búsqueda de información de salud en internet, quienes seleccionaron criterios de calidad para búsquedas bibliográficas en salud en la web, en particular para la valoración de la información sobre el cáncer en internet. Estos expertos recogieron quince criterios utilizados por las principales Agencias de Calidad (estas se clasifican en función del sistema PageRank^®(, agrupados en los dos grandes apartados siguientes:

• Criterios de calidad de sitio Web

• Usabilidad:

• Estética.

• Protección de datos y confidencialidad.

• Transparencia del patrimonio.

• Honestidad y política editorial.

• Certificaciones.

• Disponibilidad de los responsables de la información.

• Criterios de calidad de los contenidos

• Producción de la información.

• Claridad de la información.

• Complementariedad.

• Atribución, referencia y actualización.

• Equidad.

• Comprensibilidad.

• Utilidad.

• Contenidos específicos.